Abuso sexual, físico y verbal

Abuso sexual :

AI recibió denuncias de hostigamiento y abuso sexual de personas LGBT de Chicago, Los Ángeles, Nueva York y San Antonio, así como de otros lugares como Montgomery, Alabama; Washington, D.C.; Atlanta, Georgia; Filadelfia, Pensilvania, y San Francisco, California. Las denuncias incluyeron alegaciones de violaciones y otros abusos sexuales por parte de agentes de policía, como agresiones sexuales, amenazas de agresiones sexuales, contacto sexual, así como gestos y lenguaje sexual explícito.AI recibió denuncias de policías que abusaron y hostigaron sexualmente a personas transexuales en Chicago, Los Ángeles, Nueva York, San Antonio, Washington, D.C., Filadelfia y San Francisco. AI también recibió denuncias de lesbianas que fueron víctimas de hostigamiento y agresiones sexuales en manos de agentes de policía. Además, AI recibió denuncias de abuso sexual de jóvenes homosexuales en Chicago, Illinois.


Abuso físico :

AI recibió denuncias de Chicago; Los Ángeles; Nueva York; San Antonio; San Francisco, Sacramento y San Diego, California; Lehigh Valley, Pensilvania; Austin, Texas; Lincoln, Rhode Island y Connecticut de personas LGBT que fueron víctimas de abuso físico, que incluyó patadas, golpes contra la pared y azotes con el bastón.Se registraron denuncias de agentes de policía que abusaron físicamente de personas transexuales en Los Ángeles, Chicago, San Antonio y Nueva York, así como en Pensilvania, San Francisco y Washington, D.C. AI recibió denuncias de que las mujeres transexuales de color y las personas transexuales "que no se adecuan a las normas" constituyen el blanco de la mala conducta policial, lo que incluye el abuso físico. Las denuncias indican que las lesbianas son víctimas de violencia por parte de los funcionarios del orden público debido a su sexualidad, en particular en términos de su aspecto físico. AI también recibió numerosas denuncias de abuso físico de hombres homosexuales por parte de agentes de policía en San Antonio, Nueva York, Los Ángeles y Chicago, así como de otros lugares como San Francisco, California; Oakland, California; Lincoln, Rhode Island y Connecticut.


Abuso verbal :

Los informes indican que el abuso verbal homofóbico y transfóbico de la policía es un problema grave. AI recibió numerosas denuncias de oficiales que abusaron verbalmente de personas LGBT, centrándose con frecuencia en la orientación o identidad sexual percibida o en la expresión de las personas de manera derogatoria y humillante. AI recibió denuncias de Chicago, Los Ángeles, Nueva York y San Antonio sobre oficiales que cometen abuso verbal homofóbico, transfóbico, racista y sexista cuando se comunican con determinadas comunidades, como la de personas LGBT de color, personas sin hogar, jóvenes, trabajadores sexuales e inmigrantes.
AI ha recibido numerosas denuncias de abuso verbal brutal y degradante contra personas transexuales. El hostigamiento y abuso sexual denunciado ante AI incluye la humillación deliberada de personas transexuales usando denominaciones inapropiadas o el nombre anterior masculino o femenino de la persona, y poniendo en duda el "verdadero" sexo de la persona. Los defensores denuncian que muchos funcionarios no tienen respeto hacia las mujeres transexuales, se burlan de ellas y las llaman "mariposones" o "maricas".
AI recibió varias denuncias de abuso verbal hacia lesbianas, denominándolas "tortilleras" a modo de insulto durante las interacciones con los funcionarios del orden público. El hostigamiento verbal hacia las mujeres y jóvenes lesbianas con frecuencia es de naturaleza sexual. Por ejemplo, los agentes de policía hacen comentarios que sugieren que su orientación sexual debe "corregirse". El abuso verbal hacia las lesbianas a menudo se centra en las transgresiones sexuales percibidas y las denuncias indican que la policía elige para el hostigamiento verbal a las lesbianas de apariencia "masculina".
AI ha recibido numerosas denuncias de agentes de policía que denominan "maricones" a los hombres homosexuales. Además se informa que el término "maricón" se usa como un término general derogatorio independientemente de si el oficial percibe que un individuo es homosexual. Los hombres que no se adecuan a las "normas" sexuales tradicionales son blanco de abuso verbal, lo que incluye comentarios como "afeminado" y "mariquita".